Cuando alguien esta esperando palabras a través del sonido y el lenguaje descuida totalmente la sutilidad de los gestos.

SASHA GORDON

"Mientras uno más crece más necesita a Dios" eso dije en voz alta mientras doblaba una cobija, lo dije después de planear mi domingo, "si no encuentro qué hacer, me voy para el parque de Envigado y me siento a leer y a rezar". Aveces siento la piel delgaditica, como si cualquier cosa, hasta el sonido de un pájaro me pudiera penetrar y dañar, así, al terminar la oración anterior me paré y cogí mi libro de Collected Poems de Sylvia Plath.

Apprehensions

There is this white wall, above which the sky creates itself-
Infinite, green, utterly untouchable.
Angels swim in it, and the stars, in indifference also.
They are my medium.
The sun dissolves on this wall, bleeding its lights.

A grey wall now, clawed and bloody.
Is there no way out of the mind?
Steps at my back spiral into a well.
There are no trees or birds in this world,
There is only sourness.

This red wall winces continually:
A red fist, opening and closing,
Two grey, papery bags-
This is what i am made of, this, and a terror
Of being wheeled off under crosses and rain of pietas.

On a black wall, unidentifiable birds
Swivel their heads and cry.
There is no talk of immorality among these!
Cold blanks approach us: 
They move in a hurry.

Me siento como una niña y me urgen mis papás, me urge que me abracen y que me escolten a través de la vida. Pero a la hora de la verdad, cuando estoy parada al frente de ellos nada sucede, y aunque me den abrazos no me siento segura de que sean reales, muy pocos lo son, otros son deber y entiendo, no solo le pasa a mis pobres padres que ya mucho tuvieron que paternar si no a todos.

Que mal utilizar algo como un abrazo y volverlo un gesto automático que no carga nada, que no quiere decir nada. Ayer abrace a un hombre, y en ese abrazo encripte todo lo que no era capaz de decirle, todo el dolor y la tristeza que tengo adentro, la poesía y el teatro -que lo único que hacen es servirme como una caña de pescar para salvar mis sentimientos de podrirse en el fondo de mí-. Al alejarse, como si se lo hubiera dicho todo, me pidió perdón. Por qué no encriptamos la vida de mensajes necesarios e innecesarios, pedirle al agua belleza y juventud, llenar un gesto, así sea tocar un hombro con rabia y violencia o por el contrario con ternura e inocencia. Aveces trato de decir tantas cosas sin usas palabras que a lo mejor por eso aveces se me cree fría e indiferente. Cuando alguien esta esperando palabras a través del sonido y el lenguaje descuida totalmente la sutilidad de los gestos. 

El viernes fui a un bar chocoano en el paseo Cervantes, ahí me pedí media botella de viche y le pedí a la hermosísima mujer que atiende que me prestara ese libro de ensayos que tenía detrás. No recuerdo el nombre del autor, un señor etnólogo del Chocó. Había una parte que contaba las leyendas del territorio, una de ellas el origen de la muerte. Para hacer el cuento corto, Dios le regalo a Adán y a Eva que son El Cielo y La Tierra una piedra negra, la piedra era impenetrable, no se podía partir, y no tenia ninguna función aparente, ademas era infinita e inamovible. Dios, al ver el descontento de la pareja con su regalito les pregunto si a lo mejor, querían intercambiar esa piedra por un racimo de plátanos y ellos al ver que el racimo les era de mayor servicio entregaron la piedra. Dios con rabia e intolerancia por su ignorancia les dijo que bien, que pudieron haber sido como la piedra invencibles y eternos pero prefirieron ser como la mata de plátano mezquinos y finitos. 

No fue fácil leer esto pues estaba sentada en la barra y tenia por un lado a mi cita sentado al lado, la mujer que atendía y al mesero hablando de cirugías plásticas, tema que me apasiona a la hora del chisme. No se cómo enlazar esta leyenda con lo que vengo sintiendo, mucho menos con Sylvia Plath aunque estoy segura de que lo hubiera disfrutado mucho. 

Aveces uno va recogiendo plumas del suelo, una grandes, otras pequeñas, y más adelante después de cargar con plumas sin saber para qué se encuentra uno un pico, tal vez patas, tal vez no. Y al final termina con un pájaro. Espero que en algún momento todos estos órganos, tripas y sangre que llevo cargando se conviertan en algo fabuloso.