Solo distracción y olvido
Hoy los animales se despertaron alborotados, clamando, buscando algo perdido, tal vez robado. De rama en rama, gritando por algo que nadie les puede devolver, nadie podrá recuperar. Los vecinos se asoman por sus balcones, preocupados, tratando de resolverles el caos, tratando de cogerlas con manos gigantes y a lo mejor acariciar sus penas. Pero nadie alcanza.
El cuerpo y el alma me van mostrando una imagen que tenia guardada en el fondo de la mente, una imagen que a lo mejor más que guardada la tenia arrugada en el puño de la mano. Es gracioso como aveces ciertas experiencias que uno califica como incomodas más no terribles encuentran su camino devuelta a la mente reclamando, gritando, matando.
Ayer leí a Bernard Russell, decía: "Existe, no obstante, una complicación adicional, muy frecuente en estos tiempos. Un hombre puede sentirse tan completamente frustrado que no busca ningún tipo de satisfacción, solo distracción y olvido. Se convierte entonces en un devoto del «placer». Es decir, pretende hacer soportable la vida volviéndose menos vivo". Hay días en los que la contemplación aunque cada día más obstaculizada es sencilla, practica, una segunda naturaleza. Otros días parece como si se perdiera en un mar de información como la imagen de Alicia perdida en su propio mar de lagrimas en una pequeña botella. Todo es cuestión de voluntad eso si, y de percepción.
Aveces extraño, otros días olvido. Hoy en esta noche tan fría extraño mucho. No para de llover y yo no paro de pensar, no hay momentos llenos de aire ni de espacio, siempre son momentos llenos. De pensar, de hacer, de sentir. Me gusta parar y vivir en espacios de contemplación, pero últimamente, tal vez por ya casi ser diciembre, es muy duro. Extraño a una persona que no quiero extrañar, pero junto a esa incomodidad salen más cosas a la superficie, sin aire, exaltadas de tomar aire después de estar sumergidas tanto tiempo. Manzanas y peras que suben a la superficie como si las escupiera el agua de tan pesadas que son.
Llámame te sigo amando.
Envigado, Antioquia.
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