Despertar con nada que hacer más que encontrar el silver lining tiene como todo sus bondades y sus defectos, no añoro trabajar, y gracias a la vida que llevo por ahora, no lo debo de hacer ... pero tal vez en esa frase está lo que falta ¿qué añoro? desde el año pasado no tengo sueños de realización y tampoco sueño con ser nadie más que yo, no Maria la super estrella o Maria la artista o Maria la poeta, solo quiero ser Maria, tal vez algún día vuelva a ser Camila, quién sabe, pero lo que quiero es vivir en la sutileza de mi ser sin que eso me agobie, sin el sentimiento de que algo falta. En el mundo muchos queremos paz pero ¿estamos preparados para un mundo en paz? La paz tiene un sobre-estimulo muy diferente al del caos, son notas bajitas que a la menor distracción pasan desapercibidas y te dejan todo el día o toda la semana sedienta de un estimulo. 

Mi último sueño ha sido estudiar en Londres, un sueño ya materializado, que cuenta los días que faltan para conocerme y yo conocerle, es una nueva vida en perspectiva, pero y por ahora qué? 

Me gustaría trabajar en algo sencillo, algo no pretencioso, algo con una carga de responsabilidad ética más no laboral, me gustaría atender un anticuario o una librería, o tal vez algo que aún no he contemplado, algo nuevo y bonito. Quiero vivir mi vida con tranquilidad, nobleza y belleza, comiendo comidas dulces y saladas, decorando un espacio como si fuera mi almohada, quiero despertar ser de servicio de una manera muy sutil, y caminar por calles hermosas sonriéndole a las personas. Quiero que mi corazón se sienta libre de crear cada escenario que se imagine, sin presión, sin afán. Los tiempos de ser alguien, de tener afán para serlo, eso todo, ya pasó. Los tiempos de estar en la calle, de sufrir y disfrutar en manos del azar, eso ya pasó. En esta vida quiero sencillez. 

Quiero ser mansa y justa, conmigo y con el mundo, quiero sentirme como el verano en la mejilla de alguien. Como un hada o un duende de bosque, que solo deja una sensación en el corazón, nunca un impacto o una imagen clara de lo que se vio. 


El Retiro, Antioquia.




Comentarios